Hace algunas semanas hemos comenzado un nuevo año en el cual Dios nos da nuevas oportunidades para proyectarnos en nuestro ministerio, llevando a cabo diferentes actividades dentro y fuera de la iglesia, tanto para mejorar nuestro servicio hacia Él como para ser canales de bendición a los que nos rodean.

Es importante que ese trabajo, el que esperamos desarrollar, esté preparado adecuadamente y con esto me refiero a un enfoque organizado. En la palabra de Dios podemos encontrar numerosas historias bíblicas donde al pueblo de Israel se le da indicaciones específicas de cómo llevar adelante una tarea, nuestro Dios es un Dios organizado. 

Si leemos el libro de Josué, donde se nos relata acerca de la toma de Jericó, podremos notar una serie de pasos previos que debían de respetar, para llegar al momento tan esperado como lo era la toma de la ciudad tras el derribamiento de los muros. Repasemos algunos detalles: 

“Rodearéis, pues, la ciudad todos los hombres de guerra, yendo alrededor de la ciudad una vez; y esto haréis durante seis días. Y siete sacerdotes llevarán siete bocinas de cuernos de carnero delante del arca; y al séptimo día daréis siete vueltas a la ciudad, y los sacerdotes tocarán las bocinas. Y cuando toquen prolongadamente el cuerno de carnero, así que oigáis el sonido de la bocina, todo el pueblo gritará a gran voz, y el muro de la ciudad caerá; entonces subirá el pueblo, cada uno derecho hacia adelante.”  Josué 6.3-5

Este capítulo nos brinda datos tales como: la ubicación del objetivo, la organización espacial,  las personas que lo llevarán a cabo, las tareas específica, las cantidades, los elementos necesarios, los tipos de materiales, y las acciones esperadas. Así de este mismo modo Dios espera que nosotros seamos organizados a la hora de trabajar, y que mejor aprender del gran maestro.

Aspectos relevantes que debemos tener en cuenta antes de poner en marcha un proyecto:

Título: Es muy importante que lleve un título que refleje brevemente la idea a la que se apunta.

Fundamentación: Explicación del por qué se considera necesaria su aplicación ya sea en alguno de los departamentos de trabajo de la iglesia, o fuera de ella. También se especifica la necesidad observada por la cual se plantea dicho proyecto para trabajar.

Objetivos: Es todo aquello que se espera lograr luego de llevarlo a cabo. 

Destinatarios: Grupo con el que se trabajará (Se puede ampliar colocando las características específicas en el caso de ser necesario).

Localización Física: El lugar donde se trabajará.

Duración: Se indica cuánto tiempo dura. Puede ser de corto o largo plazo. A su vez se divide en:

             Fecha de inicio: __/__/__                       Fecha de Finalización: __/__/__

Tiempo: Se especifica la carga horaria que se le asignará. ____ Horas. (Esto ayuda cuando el proyecto funciona dentro de otra actividad propuesta y no como único)

Actividades: Se describen las actividades propuestas. (No es conveniente desarrollarlas una por una aquí, en todo caso si la iglesia las pide se agregan. Pero se sugiere presentarlas por separado y bien explicadas para que se pueda comprender  su intencionalidad.

Recursos: Son todas las cosas que necesitaremos para poner en marcha el proyecto. Que a su  vez se dividen en dos:

                                       Humanos: Todas las personas involucradas

                                       Materiales: Didácticos, mobiliarios, etc. 

Recuerda que antes de comenzar a elaborar cualquier proyecto,  primero debemos doblar las rodillas y encomendarnos a Dios para que él dirija todo nuestro sentir y accionar. 

La intimidad con Dios es la clave para todo, eso es lo que le da valor a tus acciones.  ¡Dios Te Bendiga!



Verónica Marisa Manzur

Verónica Manzur es Profesora de Educación Primaria, con una actualización académica en Inclusión Educativa Frente a la Diversidad.  Se congrega en la Iglesia Evangélica Pentecostal Argentina, en Las Heras, provincia de Mendoza. Forma parte de la RED INTEGRADORA DE SBA y junto a otros profesionales, voluntarios, especializados en el trabajo con personas con discapacidad dona su tiempo y conocimiento para servir a la iglesia Cristo.